'La actuación de Sacyr en el Canal daña la Marca España'

El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, asegura en declaraciones a EL MUNDO que la actitud del consorcio liderado por la española Sacyr perjudica, en su opinión, a la imagen de España.
Martinelli participa en el Foro Económico Mundial en la localidad suiza de Davos y se pronunció así a las preguntas de este diario sobre el conflicto. «La actuación de Sacyr daña la Marca España. Es así, es una empresa española y las obras del Canal son de interés mundial», afirma el presidente panameño. Pone así el dedo en la llaga que más preocupa al Gobierno español. La ministra de Fomento, Ana Pastor, considera Panamá un país estratégico para los intereses económicos españoles y teme que un fiasco en la negociación que mantiene el consorcio liderado por Sacyr dañe a otras empresas españolas en el país centroamericano y en otros de la región, según fuentes gubernamentales.

'Si el consorcio quiere lo que no está en el contrato perderá las fianzas'

Martinelli se mostró impaciente ante este diario, aunque vio margen para la negociación. «Espero que haya un acuerdo, yo lo que digo es que hablando se entiende la gente. Que negocien, pero siempre dentro del contrato, no podemos negociar fuera de él». Martinelli no impone una fecha límite, pero considera que no debería alejarse del próximo día 29, porque considera clave no retrasar la obra, no solo para los intereses de Panamá, sino del resto del mundo, porque resalta que la ampliación del Canal tendrá un efecto de abaratamiento internacional del transporte. Martinelli utiliza la misma frase que ayer mismo declaró también a la CNN y en todos sus contactos en Davos: «Llueva, truene o relampaguee las obras de expansión del canal se van a completar». No debe en su opinión demorarse más allá de 2015.
Aunque las negociaciones las lleva la Autoridad del Canal de Panamá, el jefe del Estado está al tanto de que el consorcio pide algo que no figura en la adjudicación de 2009 y es la posibilidad de no devolver anticipos. El consorcio debe devolver este año 780 millones de dólares y lo considera inaceptable, puesto que necesita esa cantidad al menos para afrontar los sobrecostes de la obra. «Si el consorcio quiere lo que no está en el contrato, perderán las fianzas», sentencia Martinelli. La aseguradora Zurich garantiza en nombre de los contratistas unas fianzas millonarias de las que 150 millones corresponden al grupo asegurador público español Cesce.

Falta de seriedad en el consorcio

El presidente panameño se lamenta de la falta de seriedad del consorcio. «Unos días piden unas cifras, otros días piden otras, lo importante es que negocien con claridad y dentro del contrato». Ante la pregunta de que el consorcio señala que sin liquidez no pueden acabar la obra, Martinelli resalta que Panamá «ya ha anticipado recursos muy importantes» y que hay voluntad de negociar, pero sin alterar el contrato.
Ante la pregunta ¿tiene queja de la actuación de la ministra Pastor o el Gobierno español? el líder panameño fue rotundo: «No tengo ninguna queja en absoluto. El Gobierno español ha estado a la altura intentando facilitar el acuerdo». Agradece el viaje de hace dos semanas de la ministra Pastor, pero recuerda que ésta coincidió en que la negociación debía ajustarse al contrato.

'No tengo ninguna queja del Gobierno español. Ha estado a la altura'

El presidente panameño dice no tener constancia de diferencias de actitud entre Sacyr y su socio italiano Impregilo, aunque las ha escuchado, pero considera en todo caso importante que hablen con una sola voz.
Se mostró también molesto con que hayan ralentizado la actividad en las obras y hace un llamamiento para que la reanuden cuanto antes. Fuentes del consorcio señalan que la ACP ha sido flexible desde la adjudicación, pero que ha endurecido su actitud en las últimas semanas a planteamientos que son lógicos. ¿Tiene una agenda oculta? ¿Está Panamá recibiendo presiones de EEUU o de otros países para prescindir del actual consorcio y contratar a la estadounidense Bechtel u otras constructoras? Martinelli lo niega rotundamente. En opinión de este pragmático empresario y político, lo más sensato es que concluya la obra quien la ha empezado y quien la conoce. Pero siempre respetando el contrato. «Si eso no sucede, la Autoridad del Canal de Panamá tiene toda la legitimidad para ejecutar el Plan B, que nosotros terminaremos las obras de construcción y ampliación».
Martinelli está promoviendo en Davos la reunión del Foro Económico Mundial de Latinoamérica de este año que va a tener lugar en su país. Quiere presentar a los asistentes de todo el mundo una Panamá moderna y líder en Centroamérica y no va a permitir que el conflicto del Canal lo enturbie.

Fuente: El Mundo